NO+AFP: algunas ideas sobre la propuesta de Iniciativa Popular de Ley

Hace unos meses presentamos en la Coordinadora Nacional de Trabajadoras y Trabajadores NO+AFP una propuesta que tiene por objetivo dinamizar el trabajo político e iniciar un proceso de fortalecimiento social y sindical para alcanzar un nuevo sistema de pensiones, de reparto, tripartito y solidario. Esta propuesta la llamamos Iniciativa Popular de Ley (IPL).

 

Luego de unas semanas, diversas organizaciones sindicales y sociales se interesaron por la propuesta, la cual se ha ido nutriendo y consolidando. También han surgido varias dudas las cuales trataremos de resolver a continuación.

 

Sobre la necesidad de la IPL

 

Creemos que es necesario dar un paso cualitativo en la lucha por un nuevo sistema de pensiones. La Coordinadora tiene una propuesta, sin embargo falta, a nuestro juicio, una forma concreta de llevarla adelante.

 

Cuando, por ejemplo, los trabajadores negociamos colectivamente (que en nuestro caso es la referencia más inmediata), presentamos nuestras demandas previamente discutidas en la base. Esta presentación la hacemos en forma de proyecto de contrato colectivo, un instrumento que expresa nuestras aspiraciones y pone un marco de referencia para movilizarnos. Sin ese marco de referencia la movilización no tiene orientaciones claras. Dicho de otro modo, la definición colectiva de objetivos permite saber el cómo y el cuándo presionar a la contraparte, sobre una base de un respaldo consciente y comprometido de las y los trabajadores.

 

Pues bien, la movilización necesaria para acabar con las AFP requerirá tener a la mano ese instrumento, que en este caso sería la elaboración colectiva de la propuesta de un nuevo sistema de pensiones en la forma de proyecto de Ley. Para llevarla adelante, deberemos iniciar un proceso ascendente de incorporación de más y nuevos sectores a la Coordinadora, así como de disposición de paralización e intervención en el escenario de la política. Particularmente relevante es la incorporación de sectores privados del sindicalismo, así como de emergentes sectores organizados de trabajadoras y trabajadores precarios y a honorarios.

 

En esa línea, se hace imprescindible además la reafirmación de la autonomía política de la Coordinadora, al enfrentarse a un escenario político que exige una capacidad de iniciativa mayor del movimiento social, enfrentado a un gobierno que mostrará su nula voluntad de mejorar las pensiones y que por el contrario apunta a aumentar la edad de jubilación y asegurar el negocio de las AFP.

 

Una tesis de salida del conflicto

 

Estamos convencidos que una transformación de esta envergadura, solo será posible con el protagonismo de las y los trabajadores organizados en una línea de autonomía e independencia de clase. En otras palabras, se trata de cuestionar las bases ideológicas del actual sistema de capitalización individual y otorgando un rol clave a las y los trabajadores en la gestión de las pensiones y la seguridad social, apuntando a superar la desigualdad entre hombres y mujeres, y garantiza las pensiones como un derecho social con rango constitucional.

 

Para ello, habrá que avanzar en un proceso de acumulación de fuerza que no solamente se despliegue desde lo social hacia una intervención política, sino que por sobretodo, mediante un proceso participativo que de legitimidad de origen a la demanda. Se trata en el fondo de abrir camino a un proceso que sea a la vez social y político: social, porque busca aumentar la musculatura de las organizaciones del pueblo, y político, porque aspira a transformar el conjunto del sistema de pensiones en Chile.

 

Algunas dudas sobre sobre la IPL…

 

¿Parlamentarización?

 

No, porque precisamente se trata de poner el ejercicio deliberativo en las manos de las y los trabajadores organizados mediante un proceso participativo para definir los detalles de un nuevo sistema de pensiones en áreas como: pensiones de migrantes, enfoque de género, honorarios, destino y administración de los fondos. Parlamentarización es cuando la fuerza de un movimiento es sustituida por la discusión parlamentaria, despojando al movimiento de la toma de iniciativa política. La IPL no busca que se negocie en el Congreso los contenidos de un nuevo sistema de pensiones, sino presentarlo en su forma más acabada posible. Aunque sea el Parlamento quien tenga que aprobar dicho sistema, su función será meramente ratificadora. La capacidad legislativa reside en el pueblo trabajador. Con esto se supera la difícil dicotomía entre incidencia y rechazo a la que fueron expuestos los movimientos sindicales y estudiantiles con las respectivas iniciativas de reforma laboral y educativa del gobierno de Bachelet.

 

¿Bajar la movilización?

 

No, porque precisamente la creación de la IPL requiere de una combinación creativa de formas de movilización masiva que incluyen formas participativas desde las bases hasta marchas y huelgas, y otras formas de ocupación del espacio público que pongan y mantengan en la agenda política la lucha contra las AFP. A la vez, la conquista de esta demanda solo podrá conseguirse mediante maniobras de fuerza como una huelga general, que demuestren la férrea voluntad transformadora de las y los trabajadores organizados, obligando al Gobierno y al Parlamento a aprobar una Ley del Pueblo. Tomar la iniciativa, desde el pueblo, para imponer una ley diseñada por las y los trabajadores (por eso la llamamos Iniciativa Popular de Ley), tiene la función de movilizar con un objetivo muy concreto, y organizar todas las formas de lucha en torno a dicho objetivo. No se trata entonces de un desvío de las fuerzas, sino de tomar el camino que nos permita agarrar más impulso: trabajar por la IPL es preparar la huelga general.

Jorge Hernández y Hernán González

SINTEC-Chile

10 de enero del 2018